Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

viernes, 20 de marzo de 2009

Vista de lince 63

Equidad de sexo



Una pregunta dirigida a doña Florence, la de El Tiempo de Bogotá, a doña Sonia, la de El Colombiano de Medellín, a doña Gloria, la de El País de Cali y doña Lucrecia la de Fajardo:

¿Verdaderamente, respetabilísimas señoras, están ustedes convencidas de que la doctora Marta Sáenz Correa, gobernadora del departamento de Córdoba en Colombia, no asistió a la Quincuagésima Tercera Asamblea de Gobernadores de esta semana en Medellín por no sentirse convocada pues faltó la expresión y gobernadora, en singular porque sólo hay una, ella?

De paso les recuerdo a los señores políticos, entre los que incluyo a los que yo sigo y acompaño en las giras, que como ya arrancamos las campañas para las reelecciones, perdón, las elecciones, afilen bien ese lenguaje incluyente, que dizque así se llama, para no caer en la infinidad de contradicciones de los usuarios de tal anomalía lingüística.

Por ejemplo. Mantengan la monedita para que vayan sorteando y no decir siempre: Buenas tardes a todos y todas, sino que la monedita les dirá cada vez cuál es primero si el masculino y el femenino y así alcanzar una verdadera equidad.

No negarle la preposición a al que quede de segundo: Buenastardes a t
odas y a todos.

No negarle los adjetivos, artículos y atributos al segundo cuando digamos,por ejemplo: los colombianos y colombianas estamos angustiados, recordar también angustiadas, así: Los colombianos y las colombianas estamos angustiados y angustiadas.

Recordar que si las mujeres son incluyentes para lo bueno: senadoras, gobernadoras, alcaldesas, cuando vayan a hablar de guerrilleros, atracadores, asesinos también les den crédito a las guerrilleras, atracadoras y asesinas para que no se sientan frustradas, pobrecitas.

Estas y otras reglitas que se saltan los seguidores de ese bodrio oratorio y que iremos señalando en esta columna harán de su discurso lo más jarto que hay en el Universo.


Tildes

Una emisora sin tildes:

no necesitas saber qué es energía



Devolvete, muchacho, que se te quedaron tres tildes



Y vos Vicky, ponete a escuchar música en el trabajo pa que te manden pa la casa a estudiar mayúsculas que sobran y tildes de las inflexiones verbales con acento diacrítico: hija y extrañándote.

1 comentario:

JuanAgudelo dijo...

A usted, como a la mayoría de los hombres, el cuento de la equidad de género en el idioma les parece un embeleco de feministas, pero imagínese que la norma fuera al revés, y que en una reunión en la que hay hombres y mujeres, y el presentador saludara con "Buenas tardes, señoras". ¿Se sentiría usted saludado, como en la propaganda de Davivienda, fuera de lugar?

Desafortunadamente, esta es una trampa que nos tiende el idioma, y para la cual la única salida es el establecimiento de la norma, arbitraria, según la cual se asume que una de las dos formas (en este caso la masculina) incluirá por igual a ambos géneros, con el consiguiente malestar del género no nombrado.

Para llevar al extremo sus ejemplos, el último quedaría mejor así: "Los colombianos estamos angustiados y las colombianas están angustiadas"...

Me recuerda un viejo chiste: ¿Cómo se hace para reconocer un pollito de una pollita? Muy fácil: uno lo pone en la mano. Si se pone temblorosito, es pollito. Si se pone temblorosita, es pollita...