Vista de lince 66

Alfie Patten

«Alfie Patten, el niño británico de 13 años que saltó a las primeras páginas de los diarios por tener una hija con su novia de 14, se encuentra "devastado". Las pruebas de ADN acaban de demostrar que Maisie, la pequeña de siete semanas, no es hija suya». Losandes.online, 09-03-26.

Es tan sólo un niño y sus fotografías han dado la vuelta al mundo dos veces en dos meses. La primera al convertirse en un guinness record de la paternidad precoz, al suponerse que había engendrado una niña con tan solo 12 años de edad. La segunda con el fiasco más grande al comprobarse que su paternidad era mentira.

Cuántos adultos estarán metidos en este embrollo sin tener en cuenta cuánto daño están haciendo a tres niños: al frustrado padre, a la madre cuya maternidad es innegable y la criatura.

Al frustrado padre porque la segunda vuelta de sus fotografías muestran un oso de tamaño superlativo con el que Alfie tendrá que cargar de por vida. Le convendría más ir buscando notaría y cambiarse el nombre porque por donde vaya pasando desde ahora hasta su ancianidad irá mostrando su impronta de frustrado padre ante los demás además del cambio que acaba de darle la vida. Los que somos padres sabemos cuánto significa ese primer día que vemos a nuestro primer hijo ¿quién lo ha olvidado? Durante dos mese este niño conoció esas delicias para que ahora le sean arrebatadas por el inapelable fallo de una prueba de ADN.

A la madre por los seis o más aprovechados que reclaman ahora la paternidad y lo hacen en público para que sus nombres también den su vuelta al mundo sin importarles el concepto que ese mundo ya ha adquirido de ella. Baste con mirar los comentarios escritos en los sótanos de las noticias digitales. ¿Dónde estaban los padres de esa criatura cuando todos los condiscípulos —al decir de uno de ellos— circulaban por su cama? A lo mejor sólo fueron dos: Alfie y el padre de la criatura. Los demás buscan protagonismo y lo consiguieron.

Y a la criatura… la vida lo dirá. Por lo pronto, que le den el apellido a que tiene derecho.

Cuando estaba meditando estas líneas de defensa a la niñez, encontré una nota en El Colombiano, el periódico de mi región en la que muestra las mismas ideas, aquí lo reproduzco o pueden leerlo en ell recorte:

Además de lo anterior la lectura de esa noticia en varios medios me dio pie para cumplir el objetivo de esta columna. Veamos:

1. Inconsistencia

«Las pruebas de ADN acaban de demostrar que Maisie, la pequeña de siete semanas, no es hija suya». Losandes.online, 09-03-26.

«Alfie declaró que le había preguntado a su novia desde hacía dos años si la pequeña era suya». La misma cita.

En la primera cita el redactor establece que la niña tiene siete semanas de nacida. En la segunda asegura que hace dos años cuando Alfie tenía 11, le pregunto a su novia si esa niña era de él. ¿Cuál niña? Si aún faltaban dos años para que naciera y un poco más de un año para ser engendrada.

2. ¿Cuántos padres?

«Llena de lágrimas, la colegiala Chantelle Steadman fue acusada de que otros dos jovencitos podrían ser los papás de la recién nacida Maisie». Vanguardia. Coahuila México

«Los vecinos dicen que otros adolescentes del sector también podrían ser el padre». La misma cita.

En las dos Citas de Vanguardia y en el recorte de El Colombiano encontramos un error de redacción que lleva a que la niña tenga dos padres según Vanguardia de Coahuila, México o varios, según El Colombiano de Medellín, Colombia. La redacción debe ser clara para que el padre sólo sea uno: fue acusada de que uno de otros dos jovencitos podría ser el papá; Los vecinos dicen que uno de otros adolescentes del sector también podría ser el padre; y que así como Alfie, uno de ellos podría ser el padre de la pequeña niña.

3. En este recorte de El Colombiano se ve un error que está de moda: la separación del prefijo. Lo correcto es preadolescente